martes, 28 de febrero de 2006

Mystic Queen

"Have you seen the Mystic Queen
Riding in her limousine
Over hills and dales 'til morning...
If you like I'll take you there
Find some colours you can wear
Colour that you've only seen while sleeping."
(Camel, 1973)



No estábamos mirando el cielo sin esperar la recompensa: una dulzura trágica, un recuerdo soñado, un abrazo camino de la soledad, la lluvia nuevamente. En la puerta de los colores, el gris destiló su sangre ácida hasta el mar. El dolor entonces cantó para los dos. Me besaste ardiendo, el llanto nos estremecía y el delirio zozobraba en este amor. Al final, estaba el ancla entumecida, congelada deseándonos llevar al comienzo del abismo, porque desde allí habíamos zarpamos. Vimos entonces llegar la mañana, torpe, hecha trizas, tímida como una flor en la ciudad arrasada. En el puerto esperaba su limosina de luces arcoiris, tu vestido de rosas heridas, y quise tu destino, tu camino y la muerte.

jueves, 23 de febrero de 2006

Camel, "The Snow Goose"


Uno de los discos más hermosos que he oído últimamente. No escucho frecuentemente rock progresivo pero de repente por curiosidad averiguo sobre algunas bandas del estilo y en particular ésta me fascinó. Llegué a Camel porque Mikael Åkerfeldt, el vocalista de Opeth, señaló en una entrevista influencias de algunas bandas progresivas en su música, entre otros, de Camel. Se trata de un grupo británico que inició su trabajo allá por los setentas y que sigue plenamente activo hasta hoy. "The Snow Goose" es uno de sus trabajos más reconocidos y está basado en la novela homónima de Paul Gallico, sobre la historia de Rhayader, un hombre jorobado y deforme que habita un viejo faro en Inglaterra y que se dedica al cuidado de las aves de los pantanos cercanos. Vive en absoluta soledad, dado el rechazo de la gente del pueblo, hasta que conoce a Fritha, una niña quien le lleva un ganso herido para que lo cuide (el ganso de las nieves es una especie de ave migratoria). Comienza entonces una hermosa amistad y una historia emocionante.
El disco se divide en breves temas que retratan los pasajes y personajes más destacados de la novela, de manera que va narrando musicalmente hasta el final de la obra. Un disco altamente recomendable de una de las más importantes bandas de rock progresivo.
Mas información en español sobre Camel:
- http://www.dlsi.ua.es/~inesta/LCDM/Bandas/camel.html
- http://www.alohacriticon.com/alohapoprock/

miércoles, 1 de febrero de 2006

Vive rápido, muere joven

“Vive rápido, muere joven y deja un bonito cadáver”

Leía en el diario a un punk comentar tras la muerte de un sujeto en una tocata en Hualpén que los punkies mueren jóvenes. No es una destino tan malo. Pensándolo bien, con el tiempo muchos terminaremos convirtiéndonos en tipos patéticos, amarrados por un sinfín de deberes, achacándole al tiempo nuestras limitaciones, sobrepasados por miles de amarras que nos convierten en correctos ciudadanos de una sociedad de mierda. Pues ¿quién se atreve a seguir sus ímpetus hasta el fin y cumplir lo dicho por Neil Young “mejor arder que consumirse lentamente”?
¿Ideas de un romanticismo barato, dignas de un rockstar de mala muerte aferrado a su último trago antes de caer en el delirium tremens? No: de un sujeto que va por el camino de lo correcto pensando en lo incorrecto, como muchos, con cierta inclinación masoquista y, tal vez, algo egocéntrico.
Si quisiera seguir esas ideas, me quedaría poco tiempo.... y no he vivido tan rápido. Bueno, estos último años un poco, pero a lo mejor siguiendo a las ratas que viviendo más aceleradamente sobreviven más años, termine como algunos de mi familia, viviendo 80 y más años. Mala hierba....
Una vez soñé que moriría a los 27 años. En cierta época pensé que más que una profecía era una orden: debía matarme a dicha edad. Pero creo que si me lo fijara como meta y comenzara a despedirme de mi familia y amigos me sucedería algo parecido a Glen Benton, que gritó a los cuatro vientos que se mataría a los 33 años (la edad de muerte de su odiado Jesús) y al final no cumplió. Bueno, para quienes disfrutan de Deicide, no fue tan malo (¿y quién disfruta de mi? )
También me plantea un conflicto lo de dejar un cadáver bonito. Tendría que someterme a varias operaciones de cirugía plástica antes de morir para así ser un poco bonito, de lo contrario no podría seguir al pie de la letra lo que dice la frase. Y el dinero para las cirugías, el tiempo y trabajo para juntarla...¡pfff!, se me pasaría la vida en ello.
La verdad es mejor dejar al destino, si es que existe, que haga su trabajo: la muerte, desde que nacemos, ya está haciendo lo suyo.